Te
conocí cuando mi vida no brillaba,
como la luna inundaste mi existir,
desde el momento que reíste junto a
la
puerta de mi coche supe que
volvería a sentir.
Luego
lograste que surcara mil planetas,
cuando te fuiste aquella luz se
obscureció,
yo que hasta ahora no quería más
amores,
tan sólo quiero volverte a ver.
Era
tan obvio el destino está marcado,
la rueda gira y a tu lado siempre
estoy,
y es que tan sólo te bastaron dos
segundos,
una sonrisa y de ti ahora siempre
soy.
Me
hiere tanto el sentirme tan ausente,
no estás presente y me inunda
soledad,
sonríe, bríndame tus ojos,
acaríciame con fuerza,
no pienses en nadie, el amor cuenta
sólo dos.
Y
si nunca mío fuera este sentimiento,
por volverte a ver, a tu sonrisa y
a tus ojos,
yo sería capaz de todo.
Y
si nunca mía fuera nuestra historia,
por oír tu voz, escuchar tus
relatos,
yo viajaría hasta tu mente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario